Una visita a la Hacienda de Tepa, distrito de Otumba
Descripción gráfica de las operaciones del embotellamiento del pulque
Rodrigo García Rangel
La existencia de pulque embotellado no es algo nuevo en México. Desde finales del siglo XIX tenemos conocimiento de múltiples esfuerzos para su elaboración. En el año de 1907, la Hacienda Santa María de Guadalupe, buscó convertir su pulque embotellado en un producto susceptible para el consumo local en la ciudad de México.
Un reportero, provisto de su máquina fotográfica, es enviado a la Hacienda para darse cuenta minuciosamente todos los detalles en que tiene establecido su negocio de pulque embotellado la empresa que ha llevado a cabo esta idea tan simpática y beneficiosa.
Todo el sistema de embotellado se hace en el propio tinacal de la Hacienda, y no en la aduana, como se había mal informado.
Expendios pintados de blanco, aseadísimos, donde una señorita vende estas botellas de pulque que van al hogar, principalmente de obreros y empleados modestos.
Los expendios de pulque son a la fecha 4 solamente: Calle del Sapo número 1, Puente de Tezontle número 5, calle de Jesús numero 6 y segunda calle de Santa María la Redonda, o sea Antiguo Puente del Zacate, número 517.
Periódico El imparcial, 22 de julio de 1907, página 5.